Interfaz amigable: Windows XP introdujo una interfaz más intuitiva y amigable en comparación con sus predecesores, lo que facilitaba la navegación y el uso.
Estabilidad mejorada: Era más estable y menos propenso a bloqueos y fallos en comparación con versiones anteriores de Windows.
Compatibilidad con Software Antiguo: Windows XP tenía una buena compatibilidad con aplicaciones y programas diseñados para versiones anteriores de Windows, lo que permitía a los usuarios seguir utilizando su software favorito.
Rendimiento: En comparación con Windows ME (Millennium Edition), su predecesor inmediato, Windows XP ofrecía un mejor rendimiento general.
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